abril 21, 2013

¡Auxilio! para la búsqueda mundial de información sobre SOVENTILO HCl

Búsqueda mundial de información sobre SOVENTILO CLOHIDRATO (o cualquier otra sal de este principio activo), antihistamínico que ofrecía laboratorios Knoll como ALERTINOL grageas en 1970
Amigo, llevo más de 10 años tratando de recuperar información sobre esta maravilla de antihistamínico que el minsalud colombiano de 1973-1974 hizo reformular no sé por qué motivo-razón válido. No encuentro información por ninguna parte. Necesito y solicito ayuda para buscar en Alemania, en las bibliotecas de Medicina, en India, en China, en Venezuela, en Abbott que compró a BASF que había comprado a Knoll. Estoy empeñado en no dejar perder esta maravilla para la humanidad. ¿Por qué no aparece por ninguna parte?
Fuera de procesos gripales e intoxicaciones menores, tuve experiencias personales positivas con picadas de alacrán, del temible ciempiés y con la mordida de mapaná, recuperando a los perjudicados rápida y completamente, sin ningún efecto adverso.

Gracias, por interesarte en este “milagro”. ¿Qué es SOVENTILO y de dónde o cómo se obtiene? ¿Dónde se consigue? ¿Por qué desapareció hasta de la química y de la historia? ¿Cuál es el misterio? ¿No te llama la atención? ¡Ayudémonos!

eco katío manguruma nasa, nada, duda, certeza

abril 20, 2013

EL REVESLIANO #27 Reaparición

ANTIPERIÓDICO que completa la trilogía que muestra tres facetas de la manipulación informativa y pone en evidencia las noticias excremento del moderno coloniaje neoliberal fascista sotánico-inversionista                                                                                                                                  
ANTIPERIÓDICO ARREVESADO #27
Un antiperiodismo que descubre y muestra el otro lado del espejo para luchar contra la ingenuidad y la inocencia de los despojados
TERCER FAROL RACIONAL, ANARQUISTA, ICONOCLASTA, ATEO Y SOLIDARIO DE VERAS. PARA ILUMINAR CON LA VERDAD A TODOS LOS PUEBLOS CONDENADOS POR CIEGOS Y DESUNIDOS DEL MUNDO                                       Director: eco katío, Urtica liber                                        manguruma nasa                                   $1.492 – abr 13 de 2013

 EL REVÉSLIANO                                                          REAPARECE con edición Dominical gigante con misterioso dilema sustancioso para acabar o invertir la Historia
Henry o Heinz Alfred Kissinger, hombrecillo genocida, se te acabó tu impunidad, los inmerecidos premios y los corrompidos privilegios para los “inversionistas”. Llegó la Nueva Era de la Honradez de los Humanos Hermanados. Cualquier diálogo, cualquier negociación, de aquí en adelante, será de cara y con la comunidad mundial. Para poder barrer del planeta tu corrupción, la de tus cómplices y la consecuente instigada y obligada de todos. Todos vamos a invertir la Vida, su Evolución y el Futuro. Tenemos las pruebas que te acusan, que los acusan, gracias a las valientes, decentes, honorables y legales acciones de los enormes héroes WikiLeaks Bradley, Assange y el empujado a la muerte… y Daniel Ellsberg y.. otros, todos. Siete mil sesenta millones de terrícolas hemos decidido liberarnos de la corrupción, de la ignorancia, del miedo y de la miseria que nos han causado y hemos decidido convertirnos en justos jueces para aplicarles las leyes vigentes acorde con los agravantes por haber abusado de sus posiciones dominantes para cometer sus fechorías de lesa humanidad contra todos nosotros. Hitler y sus compinches fueron una pera en dulce en comparación con lo hecho por ustedes. Las masacres, los despojos y la destrucción de África y América quedan en turno.                                                                                                                            

Se acabarán estos tratos preferenciales injustos: para unos, gran severidad, para amedrentar a los demás, para callarlos y domarlos por miedo; para ustedes, IMPUNIDAD Y PREMIOS inauditos, para burlarse de la Ley y de todos los pueblos. ¿Por qué razón es así?
-         Los bienes, de verdad bienes, que realmente necesitamos, deben ser: abundantes, renovables, reciclables, al alcance de todos
-         y que no tengan incidencia negativa sobre el ambiente y el futuro de la vida;
-         que faciliten y promuevan Valores, Conocimiento y Racionalidad general:
-         la Educación Pública Superior Gratuita LiRScA para todos; Ser, Humanos, Hermanos, Sanos, Libres, Racionales, Solidarios y Capaces cuasi Autosuficientes… por ejemplo. Sabiendo que Libertad es hacer lo que se debe, que es lo Ético, que es lo que pasa por el tamiz del Bien Común, que es el resultado de un simple pero profundo ejercicio lógico de sumas y de restas nada más, de todos los elementos que entran en juego en cada decisión que nos afecte o corresponda.
Pero esta “economía” de hoy, como ciencia es una patraña ya desde su misma definición. No son la conservación de los recursos naturales, ni la duración de los bienes materiales, ni las necesidades humanas, los objetivos de esa economía.
Lo que la economía estudia –eso sí- son las leyes que rigen la producción, la distribución y la circulación del “dinero” en pocas manos, excluyendo a la mayoría.
¿Y qué es eso del dinero? ¿Cuál es la expresión de la economía?
¿Cree el lector qué esto pueda ser la base de la ciencia social moderna aspirante a ser la más importante?
En efecto: una cantidad, una ley matemática, un signo numérico nulo y despojado de cualquier correspondencia con algo verdadero.
El “dinero” resulta ser la unidad artificial y arbitraria en la que se basa un sistema –el monetario-, el cual no expresa más que una cantidad vacía de valor cualitativo. Todos los billetes son falsos, sin respaldo. Con ellos nos ilusionan, estafan y despojan de los bienes reales.
Si no es el oro, la plata, u otro elemento de la tabla periódica, ¿qué da valor, hoy por hoy, al dinero?: Una descomunal mentira. De nuevo, otra falsa ciencia moderna (en este caso, la economía) tiene como fundamento una mentira expresada numéricamente. ¿Es posible encontrar un Valor, abstracto o concreto, material o intangible, que nos sirva como patrón y medida de valor, universal y justo, para las transacciones comerciales?

Entonces, estamos ¿Evolucionando o degenerando?
-        Democracia es el gobierno del pueblo para el pueblo, para la Vida
-        DEMOCRACIA es participar igualitariamente en las decisiones que nos afectan, que nos competen, es decir, participar correctamente en todas las decisiones públicas. Pueblo SOBERANO.
-       para abolir por siempre todo tipo de esclavitud y esas profesiones repugnantes mencionadas arriba, tan admiradas y premiadas aquí

WikiLeaks ha publicado más documentos clasificados que toda la prensa mundial junta.
Eso no lo digo para demostrar nuestro éxito, más bien, muestra el alarmante estado del resto de los medios de comunicación. ¿Cómo es que un equipo de cinco personas ha llegado a mostrarle al público la información más reprimida, a ese nivel, que el resto de la prensa mundial junta? Es vergonzoso.
-        Gracias WikiLeaks.  Uno de los cables contiene la transcripción de una conversación en la que Kissinger exhibe lo que es él con una honestidad brutal, a toda prueba. Kissinger afirma: “Antes de la Ley de Libertad de Información solía decir en las reuniones ‘Lo ilegal lo hacemos de inmediato; lo inconstitucional lleva un poco más de tiempo’.
Pero desde que se aprobó la Ley de Libertad de Información, tengo miedo de decir este tipo de cosas”. (Y según el cable, se oyen risas en la sala).                                                                                       
Lo ilegal y lo inconstitucional pueden ser objeto de risa para Kissinger, que cumple 90 años el mes próximo, pero se trata de un asunto muy serio para el soldado Bradley Manning.                                                        Si existiera un criterio uniforme de justicia, el Premio Nobel de la Paz Henry Kissinger, debería ser despojado de todos esos premios indebidos y afrontar un juicio severo y Bradley Manning debería recibir el Premio Nobel de la Paz y nuestra admiración y agradecimiento por su valor monumental.
Kissinger y los demás tiranuelos, ¡Que devuelvan la plata y que los metan a la cárcel y los condenen al ostracismo. Ellos no son la crema social, son la mierda antisocial!
¡Devolvámonos para recomenzar! ¿Cuáles privilegios van a reclamar y por qué?



-          Tranquilo don Kissinger que se le darán las suficientes garantías”…
-          ¿Suficientes? ¡No! ¡Más que suficientes! No seremos como ustedes que se las negaron a los condenados de ruana y a los condenados a muerte violenta, atroz, indigna y a mal vivir como don Nadies sin investigación ni delito imputable.
-                                                                                                                              
-         Estados Unidos, ¿en manos de quiénes está? ¿Quiénes y cuántos son los titiriteros que manejan los hilos del mundo?
-         ¿A qué se debe el terrorismo de Estado de los que aparecen como los que mandan sino a que los tienen presos los intereses criminales, los tienen amarrados de modo indisoluble porque por permisivos y codiciosos cayeron en trampas mortales con tres salidas: la cárcel, la complicidad esclava o el cementerio?
-         Es terrible traspasar el punto del no retorno. Ni siquiera el suicidio en silencio o denunciando sirve. Nada les devolverá el honor en la situación de descomposición a la que llegaron, todo es inútil. Todos los límites del terror fueron traspasados.
-         No solo tienen el agua al cuello sino que también tienen la soga al cuello.
-         Ya existe una parte suficiente de la sociedad para asumir las riendas y dirigir enderezando el camino y la orientación, se puede pensar en el futuro sin miseria, sin privilegios ni preferencias irracionales.
-          Ustedes, los culpables, a unos los pudrieron con dinero, a la mayoría con ignorancia. En la situación que estamos, y los criminales persiguiendo a los valientes y honrados. No hay derecho. Con idiotas abusivos y criminales así, con razón estábamos como estábamos.

Una cosa es lo de Jacob y sus compañeros de infortunio; leve y explicable; otra cosa es si se compara con las que han hecho, con los graves crímenes inexplicables que han cometido, Kissinger, Bush, Rumsfeld, reyes, reinas, tiranuelos,  conquistadores, despojadores y destructores del planeta y de sus habitantes. 
Todos estamos de acuerdo en que los anteriores son delitos y crímenes, leves, graves y muy graves; con atenuantes unos y otros con agravantes; y estamos de acuerdo en que los que los cometieron, delinquieron; obligados o por gusto, por hambre los castigados o por pasiones desordenadas los impunes.
Y todos estamos de acuerdo en que los humanos correctos y admirables son aquellos que no los cometen y que protestan contra las injusticias, que denuncian los delitos, por secretos y graves que sean; estamos de acuerdo en que buenos ejemplos son aquellos ciudadanos capaces de asumir la autoridad cuando esta esté ausente, o cuando haga falta, como lo dicen las Constituciones y de acuerdo al principio de la Soberanía Popular, y en nombre y en pro del pueblo, de la sociedad, de los máximos Valores Humanos. Lo que la mayoría evadimos o incumplimos porque nos tienen desmoralizados y amedrentados. Todo un deber de solidaridad y cohesión social que incumplimos… y por ahí nos desintegramos.
¡Cójanlo, cójanlos! Deberíamos gritar todos al presenciar un delito, es lo menos y solidario que deberíamos hacer todos y que ya no hacemos por temor a las represalias. Ya ni como testigos servimos, pues a los testigos y a los denunciantes los matan. Y con este cuento y la prostitución de las autoridades que no lo son o que incumplen con sus funciones o las omiten o las quebrantan de frente, la corrupción se ha ido extendiendo y envalentonando y contagiando a todo el cuerpo social. De ahí es de donde vamos a salir gracias a los más valientes héroes que he conocido: WikiLeaks, que parece no tener importancia y que los bandidos que gobiernan tratan de bautizar como un crimen contra el Estado, ES LA BOMBA QUE INICIÓ EL CAMINO HACIA LA CIVILIZACIÓN HUMANA, deteniendo la corrupción y a esos corruptos que, desesperados, no tendrán dónde esconderse ni guarecerse. ¿De qué los van a acusar? ¿Acaso de SER PATRIOTAS Y LOS MEJORES HUMANOS EN LA HISTORIA, REALIZANDO EL ACTO MÁS IMPORTANTE DE TODA ESTA, HASTA HOY, ASQUEROSA HISTORIA CONOCIDA? Si le hubieran sacado esos datos a China para dárselos a ellos, ¿los habrían premiado o castigado?
Escarmentarnos y amedrentarnos es lo que quieren hacer, Kissinger y los desgobiernos que él maneja con el dedo meñique, torturando a los héroes que se han jugado el todo por el todo por defender y recuperar la dignidad y la honradez del mundo, para darnos LUZ destapando todas esas inmensas ollas podridas de esos sinvergüenzas que jamás debimos permitirles que tomaran las fuerzas económicas y los bancos, que se apoderaran de las máquinas de emitir billetes falsos y de las vidas de nuestros hijos, de los puestos de mando, de las armas y de los ejércitos de las naciones. ¡Qué locos tan peligrosos están manejando el timón y los frenos de esta planeta! ¿Cómo vamos a permitirles que se conviertan en fiscales, jueces y verdugos de los más grandes héroes de la Historia, para dorar la píldora, aparentando ser víctimas, para continuar abusando del planeta y de la humanidad? ¿Cómo vamos a dejar solos a estos muchachos que, con pruebas y la palabra, están enfrentando a todos los ejércitos de la injusticia? A mí también me van a tener que matar. Aunque intuyo que todos los ejércitos y jueces del mundo se van a poner por primera vez y para siempre del lado del pueblo soberano y de la democracia participativa por el Bien Común.

Un pequeño y resumido prontuario de don kissinger es: Acusado de criminal de guerra y laureado con un controvertido Premio Nobel de la Paz en 1973, Henry Kissinger sirvió a varias administraciones norteamericanas, desde Kennedy, Johnson, Nixon a Ford, en algunos de los más tumultuosos años en la política de Estados Unidos.

El centro de este documental es el período entre 1968 y 1977, cuando Kissinger fue Consejero de Seguridad Nacional y Secretario de Estado.

Por si alguien tenía dudas acerca de la credibilidad que tendrá la flamante comisión creada por la Casa Blanca para investigar los “lapsos en la seguridad que permitieron que fueran exitosos los ataques del 11 de septiembre”, el presidente estadounidense George W. Bush, el chico, nombró nada menos que al ex secretario de estado Henry Kissinger para dirigirla.

Para la mayoría de los ciudadanos del mundo con un poco de memoria histórica y un mínimo de decencia, la elección de semejante personaje es abominable.

Pero si algo caracteriza al gobierno de Bush júnior es su absoluto descaro para revivir las memorias más sórdidas, reciclar a los funcionarios desempleados más reaccionarios e invocar a los burócratas más siniestros y belicosos de la historia reciente de ese país.

La elección de Kissinger para semejante puesto es una expresión más del absoluto desdén con que el gobierno estadounidense trata a la comunidad internacional. O tal vez Bush no se enteró de que el 4 de marzo de 2002 la Interpol pidió a las autoridades británicas que detuvieran a Henry Kissinger durante su estancia en Londres para interrogarlo sobre la investigación de que era objeto Augusto Pinochet.

O no le contaron que Kissinger había sido requerido por las autoridades de otras cinco naciones que visitó (Francia, Dinamarca, Argentina, Chile y Bélgica), en las cuales se habían ya emitido órdenes de detención en su contra, y en cada ocasión se había escabullido justo a tiempo.

Una de las razones por las que el gobierno estadounidense saboteó la creación de un Tribunal Internacional, fue para evitar que una organización global tuviera el poder de llamar a cuentas a militares y políticos por crímenes contra la humanidad.

Pero mientras el mundo de Kissinger se achica y más gente clama por su cabeza, en Estados Unidos se le sigue presentando como un gran estadista, un sabio en materia de relaciones internacionales y un espectacular asesor gubernamental y corporativo invaluable.

El nombramiento tiene lugar cuando aún está latente la euforia desatada por el periodista Christopher Hitchens, autor del libro The Trials of Henry Kissinger (EE.UU.-Gran Bretaña-Chile, 2002), en el cual se basa el documental del mismo nombre de Eugene Jarecki.

El libro de Hitchens es una recopilación de evidencias que demuestran que Kissinger es un criminal de guerra involucrado, entre otras cosas, en,
·    la prolongación de la guerra de Vietnam (tras descarrilar las conversaciones de paz de París en 1968)
·    haber sido el arquitecto de los bombardeos de 1969 contra Camboya (600 mil muertes) y Laos (350 mil)
·    el asesinato de 500 mil personas en Bangladesh, en 1971, tras el golpe de Estado del general Yahya Khan, armado y bendecido por Estados Unidos
·    la masacre de más de 200 mil personas en Timor Oriental a manos del ejército de Indonesia en 1975
Por si fuera poco, el problema de la desconfianza que provoca el currículum político del “Premio Nobel de la Paz” (recibido por una paz que no negoció), Kissinger, se trata de un individuo obsesionado con los misterios, los secretos y las conspiraciones (y no aquellas que tienen que ver con extraterrestres sino con golpes de Estado, magnicidios y el saqueo a escala gigantesca de los recursos de las naciones).

En cambio, miren la historia del compañero francés Alexandre Marius Jacob, sentenciado finalmente a 20 años de trabajos forzados en una colonia carcelaria de la Guayana Francesa, resumida en el texto titulado
POR QUÉ HE ROBADO
y con el subtítulo Los trabajadores de la noche
Explicación: Del 8 al 22 de marzo de 1905, tiene lugar en la audiencia de Amiens (Francia) el proceso contra “los trabajadores de la noche”, detenidos desde 1903, detención que ponía fin a una actividad de tres años con más de 150 robos en domicilios, hoteles, castillos e iglesias.
La banda que Alexandre Jacob formara con su compañera Rose Roux, su madre Marie Berthou, y algunos otros camaradas se proponía practicar el robo de manera científica –se dividen Francia en tres partes según la red ferroviaria- no como medio de reapropiación personal sino como una forma de ataque contra el mundo de los poderosos y como perturbación social.
La audiencia de Amiens les condenó a muchos años de cárcel y, a algunos, a Jacob, a trabajos forzados de por vida. Presentado recurso de casación, Marius Jacob es condenado en Orleans, el 24 de julio de 1905, a veinte años de trabajos forzados, y será deportado al penal de la Guayana francesa, donde permanecerá desde 1906 hasta finales de 1925, tiempo en el que intentará una veintena de evasiones, y pasará nueve años en celdas de castigo. “Por qué he robado” es el texto de inculpación que Jacob leyó ante los jueces de la audiencia de Amiens, y que aquí reproducimos.
También incluimos la carta que escribió a su madre después de la sentencia de la audiencia de Orleans.
Señores,
Ahora sabéis quien soy: un rebelde que vive del producto de sus robos. Aun más: he incendiado hoteles y he defendido mi libertad contra la agresión de los agentes del poder. He puesto al descubierto toda mi existencia de lucha; la someto, como un problema, a vuestras inteligencias. No reconociendo a nadie el derecho a juzgarme, no imploro ni perdón ni indulgencia. Nada solicito a quienes odio y desprecio. ¡Sois los más fuertes! Disponed de mí de la manera que lo entendáis, mandarme al presidio o al patíbulo, ¡poco me importa! Pero antes de separarnos, dejarme deciros unas últimas palabras.
Ya que me reprocháis sobre todo ser un ladrón, es útil definir lo que es el robo.
Para mí, el robo es la necesidad que siente cualquier hombre de coger aquello que necesita. Esta necesidad se manifiesta en cualquier cosa: desde los astros que nacen y mueren igual que los seres, hasta el insecto que se mueve por el espacio, tan pequeño, tan ínfimo que nuestros ojos pueden apenas distinguirlo. La vida no es sino robos y masacres. Las plantas, los animales se devoran entre ellos para subsistir. Uno no nace sino para servir de pasto al otro; a pesar del grado de civilización, de perfeccionabilidad, el hombre no se sustrae a esta ley si no es bajo pena de muerte. Mata las plantas y los animales para alimentarse de ellos. Rey de los animales, es insaciable.
Aparte de los objetos alimenticios que le aseguran la vida, el hombre se alimenta de aire, de agua y de luz. Ahora bien ¿se ha visto alguna vez a dos hombres disputarse, degollarse por estos alimentos? No que yo sepa. Sin embargo son los alimentos más preciosos sin los cuales un hombre no puede vivir. Podemos estar varios días sin absorber substancias por las que nos hacemos esclavos. ¿Podemos hacer igual con el aire? Ni siquiera un cuarto de hora. El agua forma las tres cuartas partes de nuestro organismo y nos es indispensable para mantener la elasticidad de nuestros tejidos. Sin el calor, sin el sol, la vida sería imposible.
Luego, cualquiera coge, roba estos alimentos. ¿Se hace de ello un crimen, un delito? ¡Cierto que no! ¿Por qué se reserva el resto? Porque comporta un gasto de energía, una suma de trabajo. Pero el trabajo es lo propio de una sociedad, es decir la asociación de todos los individuos para alcanzar, con poco esfuerzo, el máximo de felicidad. ¿Es ésta la imagen de lo que hay? ¿Se basan vuestras instituciones en una organización de este tipo? La verdad demuestra lo contrario. Cuanto más trabaja un hombre, menos gana; cuanto menos produce, más beneficio obtiene. El mérito no se tiene pues en consideración. Sólo los audaces se hacen con el poder y corren a legalizar sus rapiñas. De arriba a abajo de la escala social no hay más que bellaquería de una parte e idiotez de la otra. ¿Cómo queríais que, lleno de estas verdades, respetara tal estado de cosas?
Un comerciante de alcohol o un dueño de burdel se enriquecen, mientras que un hombre de genio va a morir de miseria en un camastro de hospital.
El panadero que amasa el pan lo tiene en falta; el zapatero que confecciona miles de zapatos enseña sus dedos del pie; el tejedor que fabrica montones de ropa no tiene con que cubrirse; el albañil que construye castillos y palacios carece de aire en su infecto cuartucho. Aquellos que producen todas las cosas, nada tienen, y los que nada producen lo tienen todo.
Tal estado de cosas no puede sino producir el antagonismo entre las clases trabajadoras y la clase poseedora, es decir holgazana. Surge la lucha y el odio golpea. Llamáis a un hombre “ladrón y bandido”, le aplicáis el rigor de la ley sin preguntaros si él puede ser otra cosa. ¿Se ha visto alguna vez a un rentista hacerse ratero? Confieso no conocer a ninguno. Pero yo que no soy ni rentista ni propietario, que no soy más que un hombre que sólo tiene sus brazos y su celebro para asegurar su conservación, he tenido que comportarme de otro  modo. La sociedad no me concedía más que tres clases de existencia: el trabajo, la mendicidad o el robo. El trabajo, lejos de repugnarme, me agrada, el hombre no puede estar sin trabajar, sus músculos, su cerebro poseen una cantidad de energía para gastar. Lo que me ha repugnado es tener que sudar sangre y agua por la limosna de un salario, crear riquezas de las cuales seré frustrado. En una palabra, me ha repugnado darme a la prostitución del trabajo. La mendicidad es el envilecimiento, la negación de cualquier dignidad. Cualquier hombre tiene derecho al banquete de la vida. El derecho de vivir no se mendiga, se toma.
El robo es la restitución, la recuperación de la posesión. En vez de encerrarme en una fábrica, como en un presidio; en vez de mendigar aquello a lo que tenía derecho, preferí sublevarme y combatir cara a cara a mis enemigos haciendo la guerra a los ricos, atacando sus bienes. Ciertamente, veo que hubierais preferido que
me sometiera a vuestras leyes; que, obrero dócil, hubiese creado riquezas a cambio de un salario irrisorio y, una vez el cuerpo ya usado y el cerebro embrutecido, hubiese ido a reventar en un rincón de la calle. Entonces no me llamaríais “bandido cínico”, sino “obrero honesto”. Con halago me hubierais incluso impuesto la medalla del trabajo. Los curas prometen el paraíso a sus embaucados; vosotros sois menos abstractos, les ofrecéis papel mojado.
Os agradezco tanta bondad, tanta gratitud, señores. Prefiero ser un cínico consciente de mis derechos que un autómata, que una cariátide.
Desde que tuve conciencia me dediqué al robo sin ningún escrúpulo. No entro en vuestra pretendida moral que predica el respeto a la propiedad como una virtud mientras que en realidad no hay peores ladrones que los propietarios.
Podéis estar satisfechos de que este prejuicio haya calado en el pueblo ya que es vuestro mejor gendarme. Conociendo la impotencia de la ley y de la fuerza, habéis hecho de él el más sólido de vuestros protectores. Pero parad atención; todo tiene un tiempo. Todo lo que se construye por la astucia y la fuerza, la astucia y la fuerza pueden destruirlo. El pueblo evoluciona cada día. Mirad que todos los muertos de hambre, todos los miserables, en una palabra, todas vuestras víctimas, instruidos por estas verdades, conscientes de sus derechos, armados con palancas, no vayan a asaltar vuestros domicilios para retomar las riquezas que ellos han creado y que vosotros les habéis robado. ¿Creéis que serían más desgraciados? Creo que todo lo contrario. Si se lo piensan bien preferirán correr cualquier riesgo antes que engordaros gimiendo en la miseria. ¡La cárcel, el presidio, el patíbulo! Diréis. Pero qué son estas perspectivas comparadas con una vida embrutecida, llena de sufrimientos. El minero que gana su pan en las entrañas de la tierra, sin ver jamás lucir el sol, puede morir de un momento a otro víctima de una explosión de grisú; el pizarrero que deambula por los tejados puede caer y hacerse mil pedazos; el marinero conoce el día de su partida pero ignora si volverá a puerto. Un buen número de obreros cogen enfermedades fatales durante el ejercicio de su oficio, se agotan, se matan para crear para vosotros; y hasta los gendarmes, los policías, que por un hueso que les dais a roer, encuentran la muerte en la lucha que emprenden contra vuestros enemigos.
Obstinados en vuestro estrecho egoísmo permanecéis escépticos ante esta visión, ¿no es así? El pueblo tiene miedo, parecéis decir. Lo gobernamos con el miedo de la represión; si grita lo metemos en prisión; si se mueve, lo deportamos al presidio; si sigue, lo guillotinamos. Mal cálculo, señores, creerme. Las penas que infligiréis no son un buen remedio contra los actos de sublevación. La represión, lejos de ser un remedio, un paliativo, no es sino una agravación del mal. Las medidas correctivas no pueden más que sembrar el odio y la venganza. Es un ciclo fatal. Desde que hacéis rodar cabezas, desde que llenáis cárceles y presidios, ¿habéis impedido que se manifestara el odio? ¡Responded! Los hechos demuestran vuestra impotencia. Por mi parte sabía que mi conducta no podía tener otra salida que el presidio o el patíbulo. Y podéis ver que esto no me ha impedido actuar. Si opté por el robo no fue por una cuestión de ganancias sino por una cuestión de principios, de derecho. Preferí conservar mi libertad, mi independencia, mi dignidad de hombre, que hacerme artesano de la fortuna de un amo. En términos más crudos y sin eufemismo alguno he preferido robar antes que ser robado. También yo repruebo el hecho por el cual un hombre se apropia violentamente y con astucia del fruto del trabajo ajeno. Pero es precisamente por esto que he hecho la guerra a los ricos, ladrones de los bienes de los pobres. También yo quisiera vivir en una sociedad en la que el robo fuera desterrado. No apruebo y no he usado el robo sino como medio de rebelión para combatir el más inicuo de todos los robos: la propiedad individual.
Para destruir un efecto hace falta destruir su causa. Si hay robo es porque hay abundancia de un parte y escasez de otra: es porque todo no pertenece más que a unos pocos. La lucha no acabará hasta que todos los hombres pongan en común sus alegrías y sus penas, sus trabajos y sus riquezas; hasta que todas las cosas pertenezcan a todos.
Anarquista revolucionario he hecho una revolución.
Venga la Anarquía.
Jacob.

Miércoles, 26 de julio de 1905
Querida mamá,
Como siempre un poco de migraña, pero soportable. Vuelvo a la audiencia, a la escena: drama y comedia social, todo a la vez. En los pasillos del teatro encuentro a mi abogado –no creas que porque te digo “encuentro” es que me estaba paseando solo. No. Cual astro superior tenía seis satélites que seguían mis evoluciones. -¡Mira! Me dice irónicamente. Con estas gafas estáis para pintaros. Parecéis un pastor protestante. – El vicario de Wakefield. – Justo. Y, no obstante, bromas aparte, no se equivocaba. Si no soy un pastor protestante, soy un rebelde protestante y protestaré hasta mi último soplo de vida contra el contrato social, como lo llama Jean-Jacques.
De forma contraria al uso común, el sorteo de los jueces no se hace en público. Vamos a asistir a esta formalidad en la sala de las deliberaciones. Algunos instantes después el telón se levanta. La cosa promete. La sala está repleta. El público se divide en dos géneros bien distintos: los amos y los sirvientes. Entre los primeros: M. Rabier, diputado (matiz lila), Madame la prefecto (no está mal, Madame la prefecto; para una provinciana lleva bien el tocado), así como otras muchas personalidades locales; muchos magistrados bien reconocibles por su inteligente fisonomía.
Entre los otros, criados, muchos criados, sólo criados. En Amiens, hubo carreteros, cerrajeros, panaderos, albañiles; en Orleans no hay más que conserjes, mozos, sacristanes y nodrizas retiradas. Un efecto del medio.
- Acusado, levántese.
- Levántese ud. También, buen hombre.
- Me esperaba su respuesta. De todas formas, le hacía más inteligente para no repetirse, me responde el presidente, un compatriota, a manera de indirecta.
Creería el buen hombre que me iría a acostar en el banco para no repetirme. Me ves tú echándome una siesta en los bancos de la audiencia… En cuatro palabras le explico el por qué de mi actitud. – Cuando ud. Viene a verme a la cárcel, yo me quito el sombrero porque ud. Se lo quita; pero aunque no se lo quitara yo lo haría, ya que me gusta ser cortés conmigo mismo antes de serlo con los demás. Pero aquí no se trata de lo mismo. Es una cuestión de dignidad. Usted juez, magistrado, al decirme: “Acusado, levántese”, “Acusado, descúbrase” y permanecer usted sentado y con la cabeza cubierta, pretende ser superior a mí; lo cual yo niego. Por más que usted se arrope con vestidos rojos, no deja de ser un hombre, igual que yo. Por otra parte, igual que Darwin, creo descender del mono y no del perro. Ahora bien, nunca se ha visto un mono lamer la mano que le pega o que le va a pegar. He aquí, señor, las razones por las cuales permanezco sentado y con la cabeza cubierta.
En el fondo este presidente es un pobre diablo. Muy inteligente, erudito y muy imparcial. Muchas veces ha intentado quitarme la palabra pero yo me he hecho el sordo y he continuado hablando. He empleado la perífrasis, el eufemismo; y, a decir verdad, si no se hubiera tratado más que de él creo que no me hubiera interrumpido nunca. Me pareció que su vecino le pisaba. Y por otra parte juega la cuestión magnética de la sugestión. ¡Entiendes! Los conserjes, los sacristanes y las nodrizas retiradas… Así, todo bien pesado y juzgado, he de ser justo. Es por lo que, te repito, ha sido imparcial.
No te contaré todas las humoradas, todos los golpes que les he ofrecido; sería demasiado largo. Me basta con decirte que les he servido Juvenal en bullabesa y Aristófanes en alioli. ¡La flor de Provenza! Después del interrogatorio de identidad: nombre, apellido, edad y profesión (profesión: empresario de derribos, es expresivo y poético), el señor abogado de los ricos da lectura a un oficio del ministerio del Interior en el que se anuncia la muerte de Royère. ¡Muerto en prisión, e inocente! Protesto contra su condena: - Royère no era un soplón. Royère no ha querido denunciarme. He aquí su crimen.
- Bueno, bueno, me dice el presidente. Si ha habido error judicial, su familia podrá obtener una revisión y una rehabilitación. Durante la exposición de los hechos, el presidente hubiera querido que hiciera un curso de raterología. Pero no me muevo; aparte de que no poseo el talento que me suponen. Esta gente cree que puedo abrir todas las cajas de caudales. Se es caja fuerte o no, ¡qué diablo! Y si son fuertes ¿por qué tendrían la debilidad de sucumbir a las caricias de los rateros? Está más claro que el agua. A propósito del testimonio Chardon –uno de los agentes-, me temía que declarara que en 1901 yo había querido comerle. Después de escuchada la declaración del testimonio Couillot, el agente sobre el que disparé, el presidente lo felicitó como a un héroe. – Pero, señor, un héroe que retrocede sólo es medio héroe, le hice observar. Esta broma no fue del agrado de la audiencia. El presidente me replicó fuertemente. Para no atraer sus iras, añadí mis felicitaciones a las de él, diciendo. – De acuerdo, ha sido digno del Capital y de la Propiedad.
Acabada la audición de los testigos, diez minutos de entreacto. Nos fuimos a los bastidores, yo y mis gendarmes. ¡Qué mentalidad la de estos gendarmes! Orleans no se halla junto al mar, sin embargo no faltan los moluscos. Al mirar la luna los ojos la ven plana; es sólo por el razonamiento que la comprendemos redonda. Al ver ciertos hombres, se les ve una cabeza; basta hablar con ellos para darse cuenta de que son acéfalos. Hace aproximadamente un mes que en Orleans ha habido una ejecución capital. Estaban satisfechos. ¡Valiente gente!
Volvemos a escena. El presidente, suponiendo seguramente que ha hecho las cosas sólo a medias, me da la palabra. Después viene el turno del defensor del Capital. Me esperaba frases vacías y vanas. De ningún modo. En un discurso breve y conciso, el abogado de la República, haciendo una comparación, por otra parte lógica, con el acta del camarada Duval, pide a los jueces el mismo resultado: la pena de muerte. Sin embargo le faltó tacto, y sobre todo sinceridad, al atacarme en mis principios, en mis convicciones filosóficas. Yo creía que él podía odiar a un hombre sin ensuciarlo. Me equivocaba. Le repliqué con un poco de ánimo y con mucha mala fe, riéndome de su talento oratorio. También fui cáustico; pero más veraz. Le dije: - Puedo creer, dije dirigiéndome a los jueces, que en esta sala hay personas que ejercen diversas profesiones. Por ejemplo, el panadero hace pan, el zapatero zapatos, el molinero muele el trigo, el albañil construye casas. Él, señores, el honorable abogado de los ricos, hace cortar cabezas… ¡bonito oficio!
¡Ah!... Me olvidaba decir que me llamó farsante. ¡Farsante!... Ciertamente, no seré yo quien le vaya a contradecir. ¿El mundo no es un inmenso teatro donde se agitan toda clase de pasiones, donde cada uno hace su papel, papel de víctima, de pícaro o de rebelde? Hay farsantes inútiles, farsantes mediocres, los hay de medianos y de superiores; y olvidaba los figurones, las inutilidades como se dice en argot entre bastidores. Para que yo haya sido objeto de la atención del representante de la Burguesía, es que debo pertenecer a los farsantes superiores. Estoy encantado: no todo el mundo puede decir lo mismo. En el drama social “Ladrón y robado” que se representó el lunes, qué pocos había que pudieran merecer este título…
Después de mi réplica, mi abnegado y eminente defensor toma la palabra. Decirte que el juez respondió de forma negativa a la cuestión: intención de matar, es hacerle el mejor y más merecido de los elogios. El tribunal podía sentenciar trabajos forzados en perpetuidad. Pero por una razón que no creo útil decirte, hizo prueba de inteligencia y habilidad reduciendo la cifra a veinte años. Después de la deliberación del jurado, el presidente me invitó a levantarme para escuchar el veredicto. ¡Levantarme para recibir garrotazos! Permanecí sentado.
Verdaderamente la ley tiene estos inauditos encantos. Del veredicto de Amiens y de este de Orleans, puede sacarse la
siguiente conclusión: La incompatibilidad de la igualdad y de la ley. En Amiens, acusado de lo mismo, en las mismas circunstancias, el jurado responde: intención de matar; aquí en Orleans, dice que no. Me hacen reír. Quieren la igualdad ante la ley, cuando aquella no existe en la naturaleza. En un mismo árbol no hay dos hojas iguales. Lo mismo pasa con los hombres.
En una sociedad en la que los intereses están separados, unos ven blanco lo que para otros es negro. Lo escribí en una carta: “No hay ni una ley, ni un reglamento que no conduzca al absurdo.” La prueba está en que por un mismo delito un hombre será ejecutado en Amiens mientras que en Orleans se saldrá con unos cuantos años de cárcel. ¡He aquí la Justicia! No estoy hablando más que de la forma moral de ver las cosas; pero, como en mecánica, la justicia obedece también a una fuerza. En mecánica hay fuerzas químicas y físicas; la fuerza centrífuga, la centrípeta, la fuerza de inercia; en Justicia sólo hay una fuerza, la fuerza del dinero. Como dice aquel: “según seas poderoso o miserable”. Es lo que les he explicado. Hay truhanes que ponen la edad de oro en la infancia de la humanidad y llaman nuestro siglo la edad de hierro. Error. Hace ocho o nueve siglos no se juzgaban las causas en una sala, sino en la arena; no se luchaba con el flujo labial, sino con armas. El caballero que poseía la mejor armadura, la mejor lanza, el mejor escudo era proclamado inocente. Se le aclamaba. Las damas se lo disputaban: era un dios, un héroe. Tenía placeres, poder y riqueza. Era el hombre honrado de aquel tiempo. Hoy, época de luces y de progreso, ya no hay armaduras sino monedas, ya no hay lanzas sino billetes de banco, ya no hay escudos sino cajas de caudales repletas de oro. Sólo pensarlo y me figuro ser un pastos de Arcadia…
Hablemos de otra cosa. He enviado mis dos gabanes, mis botines y algo de ropa interior que ya no necesito, al señor Develay. Se lo he enviado a portes debidos y urgente. Si fuera más rico lo hubiese pagado. Pero no será caro, de 1,5 a 1,75 francos aproximadamente. Escríbelos para que te den acuso de recibo.
Es inútil que Rose escriba a su hermana para que me envíe papel puesto que voy a irme de un día a otro. No tardaré en dejar Orleans. He pasado tres meses tranquilos en esta cárcel. Todo el personal se ha portado muy correctamente, dentro de lo que las leyes de la cárcel les permitía. Los burgueses van a Vichy, a Spa, a Plombières, a Baden-Baden: yo veraneo en los conventos de la República. Cuestión de gustos… y de dinero.
Tengo miedo de pasar aún un invierno en Europa si no salimos hasta marzo. Dudo de que haya una salida en octubre. Esto me fastidiaría ya que como a los tomates tampoco me gusta el frío. Apuesto que tu y Rose habréis sufrido al no recibir noticias mías. No os quejaréis, ahora tenéis que leer. Hace tres horas que escribo. Te abrazo afectuosamente. Mil besos a Rose y mis saludos a los esposos Ferré, y a todos los camaradas. Alexandre.


Odio a los gringos desde que me empecé a dar cuenta de que me engañaban en sus libros y películas de vaqueros, por los que me enseñaban a mirarlos como héroes cuando solo eran unos cobardes hijos de puta de ingleses invasores asesinos extinguidores y despojadores de los indígenas dueños de todo esto. Exterminadores que querían, cuando dizque se civilizaron (¿cuándo?) que uno mirara como a un héroe fuera de serie a “Búfalo Bill” cuando esa fiera solo exterminó búfalos, indígenas y mujeres.                                                                                                                                                                                                                 Después vino el vil asesinato “legal” de Sacco y Vanzetti, sin que, hasta ahora, se haya castigado al juez y al acusador (infames), y a los testigos falsos y a ese jurado parcializado.


-           El calvario de Bradley Manning – Publicado el 14 de diciembre de 2012 – Amy Goodman

El soldado Bradley Manning pudo, por fin, hablar públicamente en su defensa, en una audiencia preliminar al consejo de guerra al que será sometido el próximo año. Manning es la presunta fuente de la mayor filtración de inteligencia en la historia de Estados Unidos. El soldado, que se desempeñaba como analista de inteligencia en el Ejército de Estados Unidos y tenía acceso a información ultra secreta, fue enviado a Irak. En abril de 2010, WikiLeaks, el sitio web que publica documentos confidenciales filtrados, hizo público un video en el que se ve cómo un helicóptero Apache de las Fuerzas Armadas estadounidenses dispara a una docena de civiles, entre ellos dos empleados de Reuters, un camarógrafo y su chofer, en Bagdad.

Un mes después de la publicación del video, Manning fue arrestado en Irak y acusado de haber filtrado el video y otros cientos de miles de documentos. Así comenzó su calvario de encarcelamiento en confinamiento solitario, en condiciones crueles y degradantes que muchos sostienen que equivalen a la tortura, desde su detención en
Kuwait hasta los meses de detención en la base militar Quantico, en Virginia, Estados Unidos. A raíz de la condena mundial contra sus condiciones de detención, las fuerzas armadas estadounidenses trasladaron a Manning a un centro de detención en Fort Leavenworth, Kansas, donde las condiciones no son tan severas.

Mientras Manning afronta 22 acusaciones en un consejo de guerra que podría condenarlo a prisión por el resto de su vida, su abogado argumentó en la audiencia preliminar que el caso debería ser desestimado sobre la base del castigo ilícito aplicado al soldado previo al juicio.

El abogado constitucionalista de larga trayectoria, Michael Ratner, se encontraba en la sala de audiencias en Fort Meade, Maryland, el día en que Manning realizó su declaración. Ratner describió la escena: “Fue una de las escenas más dramáticas que jamás haya visto en una sala de audiencias. (…) Cuando Bradley comenzó a hablar no estaba nervioso. Su testimonio fue extremadamente conmovedor, realmente emotivo para todos nosotros, pero especialmente, como es evidente, para Bradley mismo por todo lo que tuvo que soportar. Fue terrible lo que le sucedió en dos años, pero lo describió con lujo de detalles de un modo elocuente, inteligente y consciente”.

Ratner dijo que Manning describió cómo estuvo detenido en una jaula en Kuwait: “Había dos jaulas. Dijo que eran como jaulas para animales. Estaban bajo una tienda, solo estas dos jaulas, una junto a la otra. Una de ellas contenía algunas de las posesiones de Manning, y en la otra, en la que estaba él, había una pequeña cama, una estantería y un inodoro. Permaneció en esta jaula oscura durante casi dos meses. Lo sacaron por un corto período de tiempo y luego, sin dar explicaciones, lo volvieron a colocar en la jaula. (…) Bradley dijo sobre ese período: ‘Creo que perdí la noción del tiempo. No sabía si era de día o de noche. Mi mundo se volvió muy, muy pequeño. Se convirtió en esas dos jaulas’”. Ratner agregó: “Eso casi lo destruyó”.

Luego de su detención en Kuwait, Manning fue trasladado a una base militar en Quantico. Su abogado defensor, David Coombs, dijo este mes: “El modo en que trataron a Brad en Quantico quedará grabado por siempre en la historia de nuestro país como un momento lamentable. No solamente fue estúpido y contraproducente, sino que fue criminal”.

El abogado Michael Ratner también describió el momento en que Bradley Manning explicó lo sucedido en Quantico: “
Bradley contó cómo era estar en esa celda, en la que debía dormir en una pequeña cama, con una luz
frontal apuntando hacia él, que dejaban encendida para poder observarlo. Si se movía para evitar la luz iban a despertarlo. Eso sucedía en la noche. Durante el día pasaba de 23 a 23 horas y media en la celda, quizá tenía 20 minutos de lo que denominan ‘ejercicio al sol’, que no es nada. ¿Y qué podía hacer? Porque supuestamente está en servicio, debe o bien estar de pie o sentado en esa cama de metal con los pies en el suelo y no puede apoyarse en nada. Eso durante 10 o 15 horas al día, lo que debe denominarse privación de los sentidos
”.

El relator especial de las Naciones Unidas sobre la tortura, Juan Méndez, intentó visitar a Manning, pero luego se negó debido a que las fuerzas armadas le dijeron que podrían vigilar y grabar la visita. Méndez informó: “La detención en confinamiento solitario es una medida severa que puede provocar grave daño psicológico y fisiológico a los individuos, independientemente de su situación específica”.

Los oficiales del ejército describieron el trato cruel aplicado a Manning como necesario, debido a que, según afirmaron, había riesgo de que intentara suicidarse. Sin embargo, el Capitán de la Armada William Hocter, un psiquiatra forense de Quantico, dijo que no existía tal riesgo, pero no lo escucharon. “Soy médico jefe desde hace 24 años y nunca vi algo igual”, declaró Hocter. “Estaba claro que estaban decididos a tomar un determinado curso de acción y poco importaron mis recomendaciones”.

La primera etapa del consejo de guerra, que Coombs denomina “la etapa de las mociones de castigo ilícito previo al juicio”, consideró una moción de la defensa de desestimar el caso. Si bien es improbable que esto suceda, quienes siguen el caso sostienen que la defensa solicitó, como alternativa, que el consejo de guerra considerara reducir la pena de Manning que resulte del juicio a razón de 10 días por cada día que tuvo que soportar el trato cruel y degradante en Kuwait y Quantico, lo que en teoría podría significar una reducción de seis años de su condena a prisión.

Bradley Manning está acusado de filtrar una serie de documentos a WikiLeaks, que incluyen el video de la masacre de Bagdad, dos grandes series de documentos relacionados con los registros militares estadounidenses de las guerras de Irak y Afganistán y, quizá lo más importante, la gran filtración de más de 250.000 cables del Departamento de Estado de Estados Unidos, conocida como “Cablegate” (en referencia a Watergate). Tras una evaluación realizada en agosto de 2010, el entonces Secretario de Defensa, Robert Gates, sostuvo que la publicación de los documentos “no reveló fuentes ni métodos de inteligencia importantes”. Manning se ofreció a declararse culpable de la filtración de los documentos, pero no de las acusaciones más graves de espionaje ni de haber ayudado al enemigo.

Bradley Manning cumplirá 25 años el 17 de diciembre en la prisión, fecha que también marca el segundo aniversario de la muerte del joven tunecino que se inmoló en protesta contra el gobierno corrupto de su país, lo que dio paso a la Primavera Árabe. Hace un año, cuando la revista Time nombró al “manifestante”, en términos genéricos, como Personaje del Año, el legendario informante de los Documentos del Pentágono, Daniel Ellsberg, elogió esa decisión en una declaración que también se aplica a la realidad actual: “La tapa de la revista Time nombra al manifestante, a un manifestante anónimo, ‘Personaje del Año’, pero es posible ponerle un rostro y un nombre a esa foto del ‘Personaje del Año’. El rostro estadounidense que pondría en esa tapa sería el del soldado Bradley Manning”.
-           Señor juez, ¿por qué no están detenidos –en vez del valiente, honrado y humano soldado Bradley Manning que debería ser condecorado y premiado por esta sociedad agradecida con él- los actores que están denunciados por sí mismos en esos documentos? ¿Cree usted, señor juez, que disuadirá a los que de ahora en adelante develarán más y más atropellos y crímenes, emulando a BradLEY,  cometidos por los apoderados del poder que creen que el poder brindado les da licencia e impunidad para ser corruptos corrompedores?
-           Tus progenitores, tus hermanos, familiares y amigos y gente como yo, debemos estar muy, pero muy orgullosos de tu acto de heroicidad monumental jamás visto. Yo me ofrezco a sufrir por ti y por Julián el injusto castigo que les impongan… los que mostraron el cobre en esos documentos y que le persiguen y le torturan día a día. Ellos, los que buscan castigarlos ejemplarmente para atemorizar a nuevos delatores y que no se aumenten los destapes de sus crímenes, abrieron y confirmaron la verdad que nos dice que hechos peores han ocurrido en esa asociación para delinquir y cometer todos los crímenes posibles mientras exista ese manto de impunidad de la complicidad en la que se tapan unos y otros, mutuamente… burlándose de todos nosotros, los ingenuos ciudadanos del mundo.
Uno, ni siquiera puede imaginar los límites que han traspasado esos bandidos que posan de señores mandamases y que obran y pasan como tales en el mayor fraude que se comete en cada uno de ellos y desde que inventaron esa trampa cárcel basura ilusoria y sin salida que se llama “estado”.

En esta esquina, Kissinger, Bilderberg, tronos, poder abusivo

En esta esquina WikiLeaks
Assange, Bradley…
Dignidad, Honradez, Verdad, Vida            árbitro inconsciente:
Mártires, Héroes…                                7.000.060`000.000 pueblo
                                                          ¡que decidirá dilema y futuro!  

                                      En esta esquina, Jacob, y víctimas
y rebeldes delincuentes, guerrillas

                       En esta esquina, jueces y ejércitos
                       con los dilemas: justicia o injusticia,
                       pueblo o tronos, dignidad o criminalidad
                       Libertad o esclavitud