Carta denuncia reclamo de derechos
abierta para exigir responsabilidad, justicia y respeto de todos parala Constitución y las Leyes justas por
el Bien Común.
Crónica de una muerte anunciada desde hace tiempo.
Cuando en un país, a un doble y gran costo y sin
posibilidad de control alguno, los funcionarios delegan sus obligaciones y la
razón de existir del Estado en particulares, el Estado se fragmenta, se
desintegra, desaparece, no existe… no le cumple ni satisface ni defiende ni
asegura los derechos a sus ciudadanos… es un acto de magia terrorista sin
igual, sin bombas… entonces para qué y por qué se les paga salario a quienes
delegan esos deberes, quedando sin oficio, ni razón ni responsabilidad
alguna.
Con razón nadie los ve, nadie se puede
comunicar con ellos, nadie conoce su número telefónico ni su dirección ni
siquiera con esa maravilla de internet. En la era del esplendor de las
comunicaciones fáciles es imposible comunicarse con ellos y hacer que actúen o
que respondan con agilidad, oportunidad y eficacia, pues, a la hora de la
verdad, están sin funciones y evitan chocarse o interponerse con los
suplantadores.
Cuando en ese mismo país, a un hombre
de 70 años (viejo decrépito, le dicen los de “Segurcol” en su matoneo acostumbrado, burlándose
e insultándolo, con señas vulgares además calumniándolo de
marica), que defiende su dignidad y sus bienes, que no corre ni se esconde, que
protesta y reacciona por los atropellos que sin cesar le han hecho durante más
de once años… repito, que reacciona y protesta contra los atropellos que comete
“Segurcol”, una empresa heredera de las “Convivir”, enriquecida con la máscara
de la tal e imaginaria “seguridad privada”, entonces, como represalia, hay que
seguirlo atacando, robando y dañando sus bienes, amedrentando a sus visitantes,
burlándose y disparándole a las ventanas de su propiedad, rayando más su carro,
amenazándolo y calumniándolo de “guerrillero” (la etapa final), para
justificar la acción sicarial que se ve venir, que así están anunciando…



Lo que los mantiene en vilo a él y a su
familia, poniéndolos, con ese matoneo continuo, con esa tortura psíquica
permanente, en la mira de los asesinos que abundan en Colombia… ¡ante la mirada
complaciente de todo el personal e instituciones del Estado!
Estado al que ha acudido en múltiples
oportunidades, comenzando por el señor presidente de la república, el
gobernador y ex alcalde, el alcalde y ex gobernador, con los anteriores, con los
secretarios de gobierno, concejos, asambleas, congresos, directores de
tránsito, inspectores y policía, fiscalía, defensoría, personería,
procuraduría… durante estos últimos doce años por lo menos… minando su
resistencia, atentando incansablemente contra su salud y la de su familia (por
el estrés permanente causado por el acoso y atentados contra todos sus derechos
elementales)… repito, en un matoneo cobarde y en gavilla, pues la omisión y la
complicidad de todo el aparato estatal con lo paraestatal es evidente.
Hermosa manera de mostrar el poder de
la fuerza bruta y armada de la nación contra un ciudadano honorable que a pesar
de sus errores y del maltrato del Estado ha sembrado más de tres millones de
árboles, editado cinco libros, escrito otros tantos, contra un ciudadano que ha
estado preocupado y actuante y propositivo en los asuntos de salud pública, en
los asuntos de una verdadera Educación Superior Pública LiRScA, en el enorme y
gravísimo deterioro y atentado contra la Farmacia Nacional por la magnitud del
incumplimiento de la Ley de la Farmacia durante 51 años, lo que ha
causado enormes variados e infinitos daños a la salud del pueblo y al
desarrollo de la Farmacia Nacional, lo que sin duda alguna constituye y se
puede calificar como un descomunal crimen de lesa humanidad, pues los oídos
sordos y la indiferencia ha llegado y ha corrompido al pueblo inerme y
paralizado, al Invima, a los ministerios, a los jueces y a las cortes que
tampoco han actuado como sería lo Ético, lo legítimo, lo legal, lo patriótico y
lo humanitario.
Me siento como Pirro ante y dentro de
Epiro. Rodeado de cobardes, ignorantes, esclavizados, irracionales y desunidos
en juerga permanente.
Y no tengo miedo a morir ni a
denunciar.
A uno de niño le inculcan el amor a una
patria que no existe y que uniforma y arma a los hijos del pueblo para que
defienda y ampare a los corruptos políticos que se la roban y a los que la
traicionan de todas las maneras. Ellos, los magníficos magos que desaparecen al
Estado, que se limpian con él, les hacen voltear, apuntar y usar sus armas
contra sus padres, hermanos, amigos y familiares.
¿Por qué no desfilaron el 20 de
julio y por qué no desfilan en agosto 7 los incontables e inconstitucionales efectivos
de la seguridad privada que superan en número a ejército y policía juntos para
que todos podamos apreciar la magnitud y gravedad de lo que estoy denunciando
desde hace años?
Hipócritas remplazando realidad por
ficción.
Aquí no hacen obras públicas, aquí las
pintan sobre mapas mientras se roban tres o cuatro o más veces lo
presupuestado.
Ni para qué mencionar las cárceles
vacacionales 10 estrellas para que los corruptos políticos o empresarios
disfruten una temporada… ni las cloacas hacinadas para enterrar inhumana y
desigualmente por años a los que solo portan una navaja o cualquier arma sin
permiso, en este país tan seguro (condenando además y de paso a su familia y a
sus niños al hambre y al desamparo). ¿Justicia?
Preguntémonos: ¿Quién cuida y brinda
seguridad a las entidades estatales? ¿Quién cuida y brinda seguridad a los
corruptos empresarios inversionistas nacionales y extranjeros para que se roben
la patria?
¿Quién, en cambio, cuida la vida, la
honra, la salud y los bienes del pueblo?
¿En manos de quién está la patria?
¿Existe?
¿Vale la pena vivir esclavo y
amedrentado sufriendo las orinadas, el matoneo, las burlas, los insultos, las
calumnias y las imposiciones de quienes se uniforman y disfrazan de autoridades
sin serlo… y “liberando” a las fuerzas oficiales de sus obligaciones y deberes,
dejándonos a todos sin derechos y desamparados?
Ahora, también, seguramente y para
acabar de ajustar, me tildarán de injuriador y calumniador. En nuestro poder
están las fotos, los testigos y demás pruebas que afirman lo que sostengo con
mis firmas, la nueva y la anterior, sobre este documento de reclamo de derechos
y denuncia de violación y traición por olivos y aceitunos de la Constitución
Nacional y que no es ningún derecho de petición porque aquí
se trata de una república de ciudadanos iguales ante la Ley y no de una
jerarquía monárquica dictatorial. No estoy “pidiendo” nada, estoy
ejerciendo y exigiendo los derechos Naturales y Constitucionales, es decir, los
derechos de todos y cada uno. Ese reclamo y ejercicio se hace natural y
amablemente la primera y hasta la segunda vez. Pero después de ser desatendidos
una y otra vez, se hace enérgicamente. La Constitución Nacional y las leyes
justas, las que son por el Bien Común, TIENEN QUE CUMPLIRSE o uno debe morir.
Aquí estoy y no me callaré mientras viva.
Amigo, compañero, desconocido, si está
de acuerdo con lo que acá digo, manifiéstelo reenviando, desde su computador,
este mensaje con la palabra “apoyo” a las direcciones de las autoridades a las
que está dirigido en primera instancia. Gracias. Mi salud y mi vida están en
peligro.
Pregúntenles:
¿Por qué será que
tenemos que estar siempre elevando o solicitando favores o limosnas y
DEFENDIÉNDONOS de atentados y agresiones de nuestras “autoridades” contra
nosotros, cuando se sobre entiende que son y siempre deberían ser SERVIDORES
PÚBLICOS, que para eso los elegimos o son nombrados, dirigidos y controlados
por los que elegimos para ello?
¡Nos atacan, nos
atracan… y, además, delante de los policías y al frente de los jueces… que lo
deberían impedir, los deberían detener, juzgar y encarcelar!
¡El alcalde de
Medellín nos está atracando con el predial y con lo de uso público a casi
todos, con lo de los parquímetros y con lo de las injustas fotomultas, y
continúa ahí, como si nada pasara! ¡Ni se sonroja! ¡EPM cobra porque sí o
porque no, si se usa el servicio o si no se usa! ¡Siempre cobra lo que ya se ha
pagado cientos de veces como “cargos fijos”! ¡Así, cualquiera gana e imita el
robo… y, lo peor, da mal ejemplo… EDUCANDO-FORMANDO en círculo vicioso fatal e
inexorable, niños CODICIOSOS ENVIDIOSOS CORRUPTOS ¡cada vez más ávidos y
audaces! (ver círculo: abuelo-padre-hijo-nieto- hábitos, mitos, usos y
costumbres = “cultura o incultura”. Da lo mismo).
¡Ni qué decir de
ese nido de ratas que es el Tránsito, los tránsitos, el ministerio de
transporte… y los privados “car center” que están “trabajando” por
ellos y para partir la marrana!
¡Ah!, y los
herederos de las “convivir” con sus “seguridades privadas”, es decir, con sus
“inseguridades ofensivas privadas impuestas a la brava” con sus boletas y
vacunas y atropellos… sirviéndole de guardaespaldas a los “servidores públicos”
ya que las otras “instituciones” están podridas y ocupadas planchando uniformes
para el próximo desfile del 7 de agosto o persiguiendo y golpeando al que
proteste por las inaguantables e incontables injusticias… al que tildan,
descalifican, acusan y señalan como guerrillero, es decir objetivo militar
condenado a muerte, aunque en la mayoría de los casos sea una calumnia y
solo un señalamiento oportunista y criminal que “justifique” su asesinato!
¡No sé por qué están en Cuba negociando,
comprando, vendiendo…
nuestro futuro, sin tenernos en cuenta!
¡Hemos sido despojados de nuestra posibilidad de
Ser, de Vivir, de Participar… de nuestro Estado!